Desde la Secretaria de Derechos Humanos y la Secretaria Gremial venimos trabajando de manera conjunta para hacer frente a las distintas formas de violencia en el ámbito laboral, asimismo, desde la Secretaría de Derechos Humanos con el asesoramiento del Dr. Eugenio Biafore, venimos trabajando en una propuesta para actualizar el Protocolo de Violencia Laboral hoy vigente en la EPEC, dado que el mismo no está acorde a las normativas en la materia a nivel provincial, nacional e internacional.
Compartimos a continuación la fundamentación de la propuesta, en próximos Eléctrums desarrollaremos los fundamentos legales que sustentan la misma, dando de esta manera cumplimiento a unos de los compromisos asumidos durante la campaña electoral y muy demandada por los afiliados y afiliadas.
PROPUESTA SINDICAL PARA UN NUEVO PROTOCOLO DE ACTUACIÓN PARA LA TRAMITACIÓN DE DENUNCIAS DE VIOLENCIA DE GÉNERO Y OTRAS FORMAS DE VIOLENCIA EN EL ÁMBITO LABORAL.
I.- FUNDAMENTACIÓN.
La presente propuesta sindical se acompaña para la reformulación del protocolo de actuación por la tramitación de denuncias formuladas por compañeros y compañeras de la EPEC, relacionadas con maltrato o violencia laboral, violencia de género, abuso y toda otra forma de violencia en el ámbito laboral. Tiene como base y finalidad reformular el actual “Protocolo de actuación para la tramitación de denuncias de violencias de género y otras formas de violencia en el ámbito laboral”, y transformarlo en una herramienta con intervención sindical, de prevención, actuación, mitigación de daños y reinserción laboral con perspectivas precautorias y de género. Entonces se trata de rescatar el protocolo vigente y dotarlo de una serie de herramientas que en la práctica posibilitan la prevención y la intervención de la organización sindical, junto con los compañeros o compañeras denunciantes, para intervenir en los procesos de prevención, tratamiento y reinserción en los casos denunciados con las perspectivas antes mencionada. Es preciso entonces modificar el protocolo tal y como se encuentra hoy diseñado.

En primer término, nos parece fundamental que el protocolo no sea un procedimiento dirigido, exclusivamente, a la Empresa. Es que no puede haber acciones de prevención o de intervención en las condiciones y en el medio ambiente de trabajo a los fines de prevenir riesgos, físicos, químicos, biológicos, y los que nos parecen sustantivos en orden al objeto mismo del protocolo, los riesgos psicosociales, sin una consulta e intervención necesaria y permanente del conjunto de los/as trabajadores/as. Pues son estos últimos los/as que portan la experiencia y el conocimiento cotidiano necesario para aportar conjuntamente con otros especialistas etc., como realizar la prevención y la actuación frente a toda forma de maltrato o violencia y/o de género en el ámbito laboral.
Por lo tanto como primer eje es para nosotros fundamental variar la perspectiva Empresarial para hacerla una perspectiva conjunta, Empresarial y sindical en todas las fases que el protocolo describa, tanto en la fundamentación misma, en la articulación de los mecanismos de prevención, luego en la actuación investigación en el desarrollo de las denuncias su seguimiento y sus consecuencias , como así también en la observación y recolección de datos para programar y realizar políticas que tiendan a la tolerancia cero de violencia laboral en la EPEC. Además, y fundamentalmente, al momento de pensar las situaciones de reinserción y/o reubicación y/o cambio de tareas de las víctimas de toda forma de violencia se trata de un protocolo bipartito con participación igualitaria de los trabajadores y de la Empresa para un trato digno y eficaz. Nos parece central que el comité interdisciplinario que actúa frente a la denuncia, esté compuesto paritariamente por los miembros que designe la Empresa y por los miembros que designe el propio Sindicato, adecuando entonces la manera de organizar la actuación conjunta en los ámbitos referidos.
En segundo orden, insistimos con la inserción eficiente la incorporación esencial de un mecanismo de participación de la víctima, en los procesos sumariales o en las investigaciones administrativas destinadas a la investigación y juzgamiento de conductas presuntamente compatibles con el maltrato y/o la violencia de cualquier tipo en el ámbito de trabajo. Se trata entonces de munir a la víctima de la posibilidad de inmiscuirse en el proceso de investigación, presentar prueba, alegar y recurrir el resultado dotándola de derechos fundamentales; así como también participar en el proceso de reubicación, reinserción o cambio con perspectiva de género y de derechos humanos. Creemos que de esta manera que, el delicado proceso de reinserción laboral de los/as afectados/as permite vislumbrar la posibilidad de volver al lugar natural de trabajo, u optar por otro, compatible con el estado de recuperación del compañero o compañera y además, a que se cuestione el mantenimiento de estructura jerárquica y/o el lugar de trabajo del denunciado, que ha permitido, tolerado o causado el maltrato adoptando las medidas necesarias que tiendan a paliar el maltrato y/o violencia denunciada en el sector. Además, esta perspectiva debe ser informada y guiada por el principio precautorio y prevencional que supone que, bajo ningún aspecto, ni las licencias, ni los tratamientos, ni el tiempo que transcurre para la recuperación del compañero y/o la compañera víctima, puedan ser tomados como elementos que permita, ya sea, su reemplazo u cualquier otra limitación para el desarrollo de sus tareas laborales en el área que le correspondía.
Por fin volvemos a resaltar que le ha tocado a este Sindicato llevar un trabajo de intervención y compromiso con los/as trabajadores/as, poniendo en tensión el protocolo existente por situaciones de violencia de trabajadores/as particulares, comportamientos de la Empresa que se evidencian como naturalizados a lo largo del tiempo y que causan perjuicios psicofísicos para todas las personas que trabajan. La realidad cotidiana es que los casos de maltrato laboral, cualquiera sea su forma y/o intensidad nos permite afirmar que se trata de una de las situaciones gremiales más graves a afrontar y nos obliga a repensar las maneras de garantizar el acompañamiento efectivo gremial, el despliegue y posibilitación de tratamientos adecuados, las participación en las investigaciones administrativas y el proceso de reinserción laboral, como expresión misma de la garantía de condiciones dignas de labor que asegura la Constitución Nacional a los trabajadores/as en su art 14 bis y se inscribe en las plexo de derechos humanos básicos de orden laboral.
Que le ha tocado a la Secretaría de Derechos Humanos coordinar la tarea de acompañar denuncias frente a las autoridades del Ministerio de trabajo de esta provincia por situaciones de violencia laboral gravísimas; y no dudamos que será el camino hasta que podamos lograr el acuerdo para la modificación del protocolo vigente, para garantizar que bajo ningún aspecto la conducta de autoridades y a veces inclusive de pares sea un medio o un fin de discriminación, de disciplinamiento y/o de aislamiento de compañeros y compañeras.
El protocolo debe servir para encaminar y permitir un proceso de conformación de un sistema de comité de riesgos del trabajo y por eso nos parece un elemento muy valioso que todos los aspectos que hagan a la prevención en este caso del maltrato y violencia, puedan ser hechos en forma conjunta con el gremio.
Además, proponemos la formación de un Observatorio de casos de violencia y recolección de datos para la creación de conocimiento estadístico de casos de violencia y toma de medidas y creación de políticas Empresariales y sindicales que mitiguen la violencia en el ámbito laboral.
Nos parece importante, y se reitera que al efecto de como reinscribir nuestra propuesta sea sobre el protocolo vigente que ya ha tenido su comienzo y su camino con su funcionamiento.
ESTE 24 DE MARZO “POR LA MEMORIA DE LOS 30.000”
¡¡¡TODOS UNIDOS!!! EN DEFENSA DE LA DEMOCRACIA
El pasado jueves 7 de febrero se volvió a reunir la Mesa de Trabajo por los Derechos humanos de Córdoba, en la misma participaron en nombre de nuestra organización la compañera Secretaria de Prensa Roxana Maldonado y el compañero Alfredo Seydell Secretario de Derechos Humanos, el plenario comenzó, como es habitual luego de que las distintas comisiones organizativas del acto del 24 de marzo terminaran de sesionar.
Al comenzar el plenario el Compañero Gustavo Tissera de Familiares expresó unas emotivas palabras sobre la compañera Emi D’ambra, omnipresente por su coherencia, tenacidad y militancia, dado que se cumplían siete años de su desaparición física. Entre otras cosas, Tissera puso en relieve las enseñanzas que nos dejó la compañera Emi, muchas que hemos aprendido y tantas otras debemos aprender, al finalizar sus palabras surgió un “¡COMPAÑERA EMI D’AMBRA PRESENTE!”.

Luego, durante el plenario, cada comisión expuso los avances en las mismas, como cada jueves y luego de concluir los informes, se debatió en torno la na situación actual por la que estamos atravesando los argentinos y la necesidad de la unidad del campo popular.
El mismo día en horas de la siesta, el Compañero Alfredo Seydell junto a Gustavo Tissera y Emiliano Salguero mantuvieron una reunión con el Compañero Urbano Secretario General de la CGT y el Compañero Adjunto de la UOM, a los efectos de interiorizarlos sobre la organización de la marcha del 24M, como así también sobre el funcionamiento de la Mesa de Trabajo por los DD HH, esta reunión fue solicitada por el Compañero Jorge Molina Herrera dado que desde la Mesa de Trabajo vienen realizando una serie de reuniones con las distintas centrales obreras , organizaciones políticas y sociales.
El próximo jueves la cita vuelve a ser en Av. Santa fe 11, sede de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas de Córdoba, a las 19:30 hs., para seguir discutiendo los aspectos organizativos de la histórica marcha por Memoria Verdad y Justicia, cuya consigna este año es