Se cumplió un nuevo aniversario del secuestro y desaparición del compañero Vives, ocurrido el 4 de junio de 1976. El Consejo Directivo le rinde homenaje poniendo en valor su ejemplo y realzando el mensaje de que siempre debemos tener memoria para seguir luchando.
En los “años de plomo”, la vida de los militantes estaba en riesgo constantemente porque la dictadura se ensañaba con los que peleaban por los derechos del pueblo argentino, por un país soberano y con justicia social. Quisieron extinguir la voluntad solidaria y consecuente de militantes como el compañero Vives que jamás se “achicaban” y fueron férreos defensores del Sindicato, de sus compañeros y de los convenios colectivos.
Hernán Vives (papá de Gustavo Vives, nuestro Subsecretario de Obra Social), nos fue arrebatado de su sector de trabajo, San José de Calasanz. En el momento de su secuestro estaba colaborando en la colecta de dinero para ayudar a las familias de los trabajadores perseguidos, presos o asesinados por su activismo gremial o político. Esa conducta que habla justamente de solidaridad y compañerismo, es sagrada para todos los lucifuercistas de hoy y de ayer.
COMPAÑERO HERNÁN ANDRÉS VIVES… ¡PRESENTE! ¡AHORA Y SIEMPRE!