Editorial. El pasado domingo 7, en las elecciones de medio término en la provincia de Buenos Aires, los bonaerenses, demostrando un compromiso ejemplar con el deber cívico, a través de las urnas asestaron un duro golpe a la soberbia, crueldad y falta de empatía del Gobierno Nacional.
Desde el inicio del mandato libertario, en Eléctrum hemos publicado, desde la mirada de trabajadores organizados, todas y cada una de las injusticias y atropellos llevados adelante por el Ejecutivo Nacional contra los sectores populares en su conjunto, la entrega sin precedentes de la soberanía nacional y la vulneración de los derechos más elementales, que tanto esfuerzo costaron alcanzar. No satisfechos con las políticas de exclusión y marginación contra los que menos tienen, avanzaron contra los trabajadores formales e informales, como así también contra sus organizaciones.
El domingo, el pueblo salió a decir basta. La contundente derrota de Milei y sus patrones, lejos de llevarlos a una autocrítica, se pronunciaron por una ratificación y profundización del rumbo, si es que lo hay, económico.
Ante lo arriba descripto , sumado a la fragilidad institucional a la que llevaron a la república, como lucifuercistas y trabajadores organizados entendemos que los tiempos que se avecinan, donde pretenden llevar a cabo una reforma previsional y laboral que empobrezca más aún a los jubilados, e incremente la precarización de los trabajadores, el freno hay que empezar a ponerlo ahora con la articulación de las organizaciones sociales, políticas, sindicales, estudiantiles, de derechos humanos, etc., en la calle para luego en octubre darle su merecido en las urnas.
Compañeros y compañeras, no podíamos dejar de pronunciarnos ante esta realidad, frente al nuevo panorama que se presenta ante el triunfo aplastante del pueblo bonaerense.
