TODOS A LA MARCHA ESTE 24 DE MARZO

Desde la fractura y desgarramiento que significó el gobierno del proceso militar entre 1976 y 1983, marchar por la Memoria, la Verdad y la Justicia, reivindicando la vida de los 30 mil compañeros desaparecidos es una cita importantísima. Sus luchas y sus sueños no fueron individuales sino colectivos, lucharon por un país más justo, más soberano, más libre, más democrático, y cayeron a manos del terrorismo de estado genocida y apátrida que, a la par que asesinaba militantes, trabajadores, delegados y dirigentes, sentaba las bases para la entrega de soberanía, destrucción de la industria y empobrecimiento de la población: con Martínez de Hoz llegó la desregulación financiera, el endeudamiento externo y la apertura importadora.

 En este sentido, reivindicar a los 30 mil, luchar por la condena a los genocidas y por Memoria, Verdad y Justicia, han sido banderas que desde la Secretaría de Derechos Humanos y como lucifuercistas venimos sosteniendo. Todos los años el 24 de marzo es importante y en estos 40 años desde recuperada la democracia se han jalonado distintas consignas y reivindicaciones, así llegó la derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, o el impulso a los juicios de lesa humanidad en todo el país.

En defensa de la Soberanía Argentina y los derechos

Este año la marcha del 24 de marzo, en el Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia, se da en un contexto de especial significancia en tanto asistimos a un Gobierno Nacional que aplica políticas particularmente virulentas contra el sistema de derechos sociales, laborales, previsionales, acompañadas de un componente represivo, antidemocrático y negacionista.

A esto se suma el ataque abierto y en ocasiones inédito a la Soberanía Nacional, en esto queremos hacer hincapié. Ni siquiera los gobiernos de facto, ni el más terrible de los gobiernos de facto que tuvimos que fue el de 1976, se atrevió a tanto en materia de entrega de la Soberanía Nacional, así lo demuestra día a día el gobierno, siendo un hito sin dudas lastimoso la apertura al patrullaje del ejército norteamericano del Río Paraná y la mal llamada hidrovía, que entrega la soberanía fluvial, que la Argentina, con altibajos, viene defendiendo desde las batallas de la Vuelta de Obligado.

Contra el Negacionismo y por los 30 mil siempre presentes

Desde la Secretaría de Derechos Humanos y como Luz y Fuerza escogimos como consigna: Este 24 de marzo, por la Memoria de los 30 mil, Todos unidos en defensa de la democracia, dando centralidad a la presencia de los 30 mil que, como cada 24, debemos tener presentes, porque vienen por la Soberanía Nacional, vienen a arrebatarnos todos los derechos; soberanía y derechos que esos compañeros murieron defendiendo, blanco de la dictadura genocida.  Pero, además, hay un fuerte componente negacionista en el gobierno libertario y también por eso es especial este 24 de Marzo, porque asistimos a la prédica desde el estado de un discurso negacionista, algo que en estos 40 años de democracia, jamás había existido. Si bien tuvimos expresiones en un Macri, que significó que durante los cuatro años de Cambiemos hubo retrocesos en lo que significa Memoria, Verdad y Justicia, como demoras en los Juicios, o el intento de impunidad con el 2×1, que aún en el gobierno de Alberto Fernández, también hubo un parate importante de los juicios, pero jamás desde el estado se bajó un discurso negacionista, que no es sólo un discurso, sino que están creando subjetividad y están construyendo un relato. Por eso en la consigna pusimos con mucha fuerza la reivindicación de los 30 mil compañeros desaparecidos, que están siempre pero este año particularmente.

Por la Unidad y la democracia

Decimos Todos Unidos, porque este no es tiempo de mezquindades, por todo lo que venimos diciendo que está en juego, hoy hay que hacer los esfuerzos más grandes para lograr la unidad del campo nacional y popular. Aquel que no está con la unidad, realmente le está haciendo el juego a la ultraderecha. La consigna pone el énfasis final en la defensa de la democracia, porque creemos que hay que insistir muy fuerte con esto, se pagó un costo muy alto por la democracia que hoy vivimos, y es en definitiva por lo que lucharon nuestros compañeros desaparecidos: contra la persecución, la proscripción, la cárcel, la violencia y el terrorismo de estado. 

A partir de esto es que nos planteamos desde la Secretaría salir a militar fuertemente este 24 desde el concepto de unidad. En esto, la marcha organizada por las mujeres el 8 de marzo fue ejemplar y unificadora.

Que este 24 de marzo sea contundente

De la misma manera, este 24 esperamos una marcha unificada, sería muy importante y un mensaje muy claro frente a las políticas de ajuste y recesión que afecta al pueblo todo y frente al ataque del gobierno a la Memoria, la Verdad y la Justicia.

Fue bueno que el Senado haya rechazado el DNU 70/2023, y esperamos que así lo haga Diputados y la Justicia, pero estos sectores de poder tan particulares que están abrevando al Gobierno de Milei, no entienden de institucionalidades y van a avanzar. A lo único que le temen y no pueden parar es a la movilización popular, que es más que nunca necesaria para frenar esta embestida.  

Convocamos a todos los lucifuercistas a dar una respuesta contundente en la calle, para nosotros es un deber estar presente este 24 de marzo, por a la memoria de nuestros compañeros detenidos desaparecidos por la dictadura Tomás Di Toffino, Alberto Caffaratti, José Brizuela, Hernán Vives y por la memoria de Agustín Tosco, a quien lo mató la persecución.

Todos ellos, junto a los 30 mil, fueron blanco del terrorismo de estado y la dictadura y perdieron la vida luchando por la democracia, la soberanía y los derechos conquistados.

ESTE 24, MARCHEMOS EN MEMORIA DE ESOS COMPAÑEROS Y LEVANTEMOS EN ALTO ESAS BANDERAS, EN DEFENSA DE LA DEMOCRACIA Y UNA PATRIA JUSTA Y SOBERANA. 

Alfredo Seydell / Secretario de Derechos Humanos



MEMORIA

Tener memoria… Hacer memoria… Defender la memoria… Bancarse la memoria…Ser asaltado por la memoria… Pero ¿Qué es la memoria? ¿Dónde reside? ¿Para qué sirve?

En el Mes la Memoria, la Verdad y la Justicia, en este mes de Marzo es siempre conmovedor hablar de la memoria. Aun cuando una no lo piense, más allá que por muchas razones cotidianas no se esté pendiente del Mes de la Memoria, anda una con la emoción a flor de piel. Tengo la sensación que irse acercando al 24 de Marzo es acercarse al momento en que ocurrió todo. Un tsunami, un terremoto se desató y arrasó con todo. Ya nada fue igual. Nos llevó mucho tiempo encontrar sentido al sin sentido.

En estos días se pretende borrar la memoria; se dicen mentiras sobre la memoria; se la descalifica para que reine el vacío y el olvido. Y esta pretensión es planificada porque busca hacernos olvidar de quiénes somos. Nadie es sólo por sí mismo. Somos por nosotros y por los demás; somos por quienes nos criaron, por quienes nos aman, por aquellos y aquellas personas con quienes compartimos nuestra vida aunque sea un corto instante. Somos por todo lo vivido, lo bueno y lo malo, lo divertido y lo trágico. Somos por todo lo que nos ha ido moldeando hasta el día de hoy.

Cuando el negacionismo pretende hacernos creer que esto no pasó, que no fue un genocidio, que no fueron 30.000 entre quienes están mis familiares, mis compañeros de elenco, mis compañeros de militancia, quieren hacernos creer una realidad inexistente, mentirosa y las mentiras tienen patas cortas justamente porque la memoria está ahí, ¿en dónde? En nuestro propio cuerpo.

Fíjense que todo lo vivimos con nuestro propio cuerpo, lo personal, lo familiar, lo político, lo social y todo queda acobachadito en algún rincón del cuerpo. Hay miradas que se nos graban para siempre, palabras que nos marcan para bien o para mal, instantes que son parte de nuestra estructura corporal.

Por lo tanto, ¿cómo pueden pretender que el tsunami que entró por la ventana y se llevó nuestra vida tal como la conocíamos pueda ser negada por nuestro propio cuerpo?

Pienso siempre que para comprender el Mes de la memoria no alcanza con conocer lo que sucedía antes del golpe de estado donde ya había secuestros y torturas y crímenes; o a partir del 24 de marzo cuando los genocidas asumen el poder y despliegan todo su plan de terrorismo de estado para imponer un plan económico. No alcanza con saber por ellos mismos que nos robaron nuestros niños y niñas porque los íbamos a criar en el odio. No alcanza para comprender el Mes de la memoria con saber que la desaparición forzada es el robo de la muerte y por lo tanto la subversión del orden de la vida. No alcanza si el conocimiento que podemos adquirir de lo acontecido no lo hermanamos con la propia herida. Todas las personas tenemos una herida. La herida profunda, la que convive con nosotras y nosotros. La herida que es casi imposible de nombrar. Creo que si desde la herida se transita el mes de la memoria podemos encontrar lo colectivo, el alma colectiva; podemos vislumbrar que desde la herida no se miente, ni se trata de engañar; la herida no nos permite el olvido ni la negación. La herida que cada quien tiene nos impulsa a compartir, a vivir, a comprender, a respetar, a luchar. Quienes nos hirieron y aquellos y aquellas que con su negacionismo buscan mancillar la memoria desconocen la fortaleza que nos despertaron al herirnos.

Por eso también creo que la herida que anida en nuestra memoria cuerpo es la posibilidad real de hacernos seres humanos.

Marzo trae la memoria de lo que fuimos y por lo tanto somos, trae el compromiso de profundizar para encontrar sentido a la herida de cada quien y de luchar por Memoria, Verdad y Justicia.

 Mariú Carrera, miembro de Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas de Mendoza