El pasado miércoles 20 los compañeros Alfredo Seydell y Roxana Maldonado viajaron a Quimilí (provincia de Santiago del Estero) invitados por el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) para participar de una serie de actividades previas al día de La Memoria por La Verdad y la Justicia. Dicha invitación llegó a través del compañero Carlos Alberto González, ex preso político, integrante del Colectivo Nacional por la Memoria que actualmente se desempeña en la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación, con el cual se han articulando distintas iniciativas, siendo este compañero el nexo entre la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y nuestra organización sindical.
El MOCASE, como todos los años, inició el ciclo lectivo de la Escuela Agroecológica en la semana de la Memoria por la Verdad y la Justicia en su sede de Quimilí, donde alrededor de 170 jóvenes, hijos de campesinos de monte adentro, participaron de diferentes actividades reflexivas sobre lo que significó la violenta dictadura cívico militar iniciada el 24 de marzo del 1976.
Nuestros compañeros Secretario de Derechos Humanos y Secretaria de Prensa junto al compañero González participaron en carácter de invitados, compartiendo instancias de conversatorio – debate tanto en la Escuela Agroecológica, como así también en dos escuelas primarias y una secundaria de Quimilí. En ellas, los compañeros compartieron sus vivencias durante la última dictadura, respondiendo las preguntas que los jóvenes y niños formulaban sobre distintos aspectos de aquel triste momento de nuestro país, intercambiando a la vez un análisis coyuntural sobre el cual estamos atravesando los argentinos con el actual gobierno negacionista.
En los encuentros realizados en la sede del MOCASE se pudo observar un alto grado de organización como así también una participación activa de los jóvenes, provenientes de distintas comunidades campesinas de Santiago del Estero. A su vez, los alumnos de tercer año de la escuela Agroecológica fueron los coordinadores y animadores de las charlas en las escuelas primarias y secundarias de Quimilí, proponiendo en el cierre de las mismas una pintada de pañuelos blancos, con gran aceptación de los presentes, donde además se pudo observar la articulación del MOCASE con las escuelas.
En el predio del MOCASE se realizaron distintas actividades que culminaron el día sábado con una evaluación de la semana y puesta en común, para luego dirigirse a la plaza de Quimilí, donde instalaron una radio abierta y una olla popular, donde también se realizó el Pañuelazo, convocatoria de los Organismos de Derechos Humanos actividad llevada a cabo por los jóvenes colgando los pañuelos en las calles adyacentes a la plaza.
Al momento del balance de las actividades los compañeros González y Seydell junto a la compañera Maldonado realizaron una devolución de sus vivencias en esos días. Luego, dos integrantes del MOCASE les entregaron un presente, que consistió en bibliografía que refleja su testimonio y trayectoria como comunidades campesinas y rurales organizadas.
Durante los momentos de descanso se intercambiaron experiencias tanto como trabajadores lucifuercistas organizados, como la vida en ruralidad y comunión con la naturaleza, intercambio que sin lugar a dudas enriqueció a ambas partes.
Como resultado de tan enriquecedora experiencia, quedó constituida una sólida relación con las y los compañeras del MOCASE, a la vez que los compañeros trajeron una vivencia ajena a nuestra realidad, pero claramente con un punto en común, y es que tanto los campesinos como los lucifuercistas somos conscientes que los derechos alcanzados son fruto de nuestras luchas y de quienes nos precedieron en las mismas, y las experiencias compartidas reafirman la convicción de que hoy más que nunca, trabadores asalariados, estudiantes, campesinos, y toda la comunidad en sus diferentes formas de organización debemos enfrentar a un gobierno nacional que viene por todo y por todos, incluyendo la Soberanía Nacional y los recursos naturales de nuestra Patria.
El Domingo la cita se dio en la plaza Durante el mismo la compañera Deolinda Carrizo, referente del MOCASE-VC – (V.C. – Vía Campesina – Organización Internacional de los movimientos Campesinos de intercontinentales). Hizo uso de la palabra con un alto grado de emotividad.





